Atención, propietarios de pequeñas empresas: Internet está aquí para quedarse.
Por supuesto, hoy en día, nadie duda de este hecho (pero muchos solían hacerlo, eh, McDonalds).
Casi el 80% de los usuarios de Internet en España hacen compras y reservan servicios a través de un sitio web regularmente. Por otra parte, donde hacen compras locales es casi siempre gracias a una búsqueda en Google.
Las grandes empresas son conscientes de ello. Trabajan todos los días para explotar este hecho, mejorando la experiencia online de sus clientes. Incluso pequeños ajustes, como un aumento de un segundo en la velocidad del sitio web, pueden significar grandes aumentos en los beneficios.
Los propietarios de pequeñas empresas, sin embargo, a menudo son reacios a poner sus negocios en Internet. Esto plantea un gran problema. Las pequeñas y medianas empresas representan una gran parte de la economía; el 99% de todas las empresas entran en estas categorías. Y en Europa, la mayoría de estas empresas se encuentran, en la actualidad, fuera de Internet.
Entonces, ¿por qué las pequeñas empresas no están online? Hemos reunido las principales razones aquí:
‘¡Es que una vez me timaron!’
A menudo hacemos esta misma pregunta a los dueños de negocios locales. Y una respuesta recurrente que encontramos es la siguiente: ya han intentado estar en Internet y les ha salido rana.
Muchos de estos propietarios de pequeñas empresas intentaron dar el salto al mundo online durante los primeros años de la década de 2000, cuando el uso de Internet tuvo su primer gran aumento (entre 2000 y 2010, los usuarios de Internet en todo el mundo se triplicaron).
Pero en estos primeros momentos del boom digital, obtener un sitio web era una tarea tediosa y cara. Aún así, estar en Internet parecía ser muy prometedor, y muchos propietarios de negocios terminaron apostando por un sitio web caro, pero sin un beneficio evidente. Además, a medida que Internet maduró y mejoró, los sitios webs creados en esos inicios pasaron rápidamente a ser obsoletos.
‘¡Cuesta un riñón!’
Tan solo hace cinco años, crear una simple web podía costarte miles de euros.
Este precio excesivo, combinado con un rendimiento difícil de medir, ha marcado a muchos propietarios de pequeñas empresas. ¿Quién puede culparlos por ser cautelosos?
Pero muchos creadores de páginas web hoy en día son mucho más asequibles que en el pasado, y la mayoría ya no exigen altos costes de mantenimiento.
Mucha culpa tienen proveedores como Wix y SquareSpace, que te permiten construir tu propio sitio web en su plataforma. Pero mientras que construir algo tú mismo es casi siempre más barato, tienes que saber cómo hacerlo.
Aunque millones de perfiles se han creado con Wix, por ejemplo, sólo el 4% permanece con ellos. Y ese es el número más alto de la historia.
La conclusión aquí es que, literalmente, millones de personas van a empezar a construir sitios web a medida con Wix, y luego, por alguna razón, lo terminarán abandonando.
‘Si eso ya lo haré en otro momento…’
Los dueños de pequeñas empresas suelen estar solos.
Tienen que dividir cuidadosamente su tiempo entre la prestación de servicios y las tareas de gestión. Mantener un sitio web es, en la mayoría de los casos, mucho trabajo adicional.
Muchas pequeñas empresas también nos dicen que están bien ahora mismo sin estar en Internet, así que no ven en qué les beneficia una presencia en la red.
‘No soy un cerebrito’
Construir y mantener un sitio web requería un profundo conocimiento técnico que, hace tan sólo un par de años, sólo tenían los desarrolladores más capacitados.
Pero la realidad actual es completamente diferente. Es difícil conseguir hacerlo más sencillo de lo que es actualmente.
Los sitios web pre-construidos, o ‘click-&-go’, están entre las opciones más baratas. Significa que alguien construya el sitio web para ti a un coste realmente bajo.
Además, cuentas con la ventaja añadida de que su diseño y función son supervisados por profesionales.
Nunca digas nunca
Aunque no cuesta entender por qué algunas empresas locales se abstienen de seguir una estrategia digital, si alguna vez hubo una segunda oportunidad para ello es esta. Ahora.
Los sitios web son extremadamente accesibles y fáciles de administrar. Incluso las personas sin ningún tipo de experiencia pueden llevar fácilmente su propio sitio web hoy en día. Los smartphones y las conexiones a Internet más rápidas han hecho que los consumidores acudan a los expertos en el mundo digital allá donde vayan.
No son sólo los Milennials. Todas las franjas de edad se han adaptado a los grandes cambios tecnológicos de los últimos años. Ya no nos basamos en la información de amigos o familiares; sólo tenemos que ir a Internet y buscar un barbero o electricista cerca por nuestra cuenta.
Es probable que las empresas locales que no aparezcan en el mapa digital (o, más concretamente, en el mapa de Google) se enfrenten a grandes dificultades en un futuro próximo, ya que todas estas tendencias sólo apuntan a una dirección: va a ir a más.